Cómo triunfan los niños (Paul Tough)

Este es un libro que recomiendo a todos quienes son padres, psicólogos o profesores. Un libro que, sin duda, debe estar dentro de su repertorio de libros leídos o por leer.

El libro muestra décadas de investigación, donde especialistas de varias áreas se han preguntado cómo poder hacer, por ejemplo, que los alumnos sean exitosos.

El libro me deja varias lecciones, dentro de las cuales, la importancia del carácter, exaltando valores que mencionaré más adelante. Por ahora, decir que es un gran libro que, sin duda, tomaré en cuenta en mi proceso de educar a mi hija.

Destaca en este libro la importancia del cariño, la comprensión y contención que deben tener los padres cuando se es niño. Estudios han demostrado la importancia de proteger a los bebés de traumas graves y situaciones de estrés , ofreciéndoles una relación segura de crianza y educación. Y si bien esto no es el secreto para triunfar , puesto que hay otros factores, es una gran parte. 

Hay un estudio de Michael Meaney. Donde mamás ratas lamían a sus crías. El resultado de esto es que le daban mayor seguridad al interactuar con el enfermo versus las crías que no habían recibido este gesto, enseñándoles cómo actuar en situaciones de estrés , generando calma y apaciguamiento en sus crías. 

 Muchas veces creí en la frase que dice: "el árbol que crece torcido no se puede enderezar". Antes de leer este libro, pensaba que los adolescentes están perdidos y si ya tuvieron una mala infancia, nada se podría hacer por ellos. Pero en este texto se menciona que la adolescencia es un momento donde se pueden dar puntos de inflexión, ya que los adolescentes tienen la capacidad de repararse y rehacer sus vidas de una forma que los niños no. En esta etapa se puede lograr una profunda transformación: "el momento en el que una persona joven logra alejar la distancia que le acerca a un fracaso casi seguro, para empezar a seguir el camino hacia el éxito".

El libro es capaz de demostrar con hechos todas las teorías expuestas, casos reales de personas, adolescentes, niños, estudios que se realizaron por años que sacan a la luz la realidad e importancia del carácter por sobre la inteligencia.

Aprendiendo a ser optimista

David Levin se dio cuenta de que los alumnos que terminaban la universidad no siempre coincidían con los que tenían mejores calificaciones en el colegio, sino los que poseían otros talentos, como por ejemplo, el optimismo, la flexibilidad o las habilidades sociales.

La clave del éxito serían la conformación de siete características: determinación, autocontrol, entusiasmo, inteligencia social, gratitud, optimismo, curiosidad. Ahora hagamos un ejercicio, ¿crees tener todas o algunas de estas características? ¿Y de ser así, cuánto crees que ha influido en tu vida actual? ¿Te sientes exitoso?

También se destaca la importancia del fracaso o error como formador del carácter. ¿Cuántos de nosotros, cuando niños, no se nos dijo que éramos tontos por tener bajas calificaciones? ¿Cómo hubiera sido la realidad si en lugar de esos calificativos se nos hubieran proporcionado otras herramientas, de autocontrol por ejemplo, de analizar en qué habíamos fallado para hacerlo mejor la próxima vez, volver a intentarlo, cambiar el método?

Pero luego de ese sermón, ¿Qué motivación nos podía quedar?

Por otro lado, la fortaleza y motivación son dos rasgos que deben ir juntos de la mano, inseparables, ya que, por ejemplo, la motivación por sí sola no es suficiente para alcanzar los objetivos si no se tiene la fortaleza para luchar contra la adversidad.

Me quedo con que la inteligencia y el carácter son maleables, se pueden mejorar.

Otro concepto que me pareció relevante es la amenaza del estereotipo, a considerar por favor.

Se hicieron varios estudios, pero del que me acuerdo era de un grupo de ancianos a quienes les hacían un test de lectura. Eran dos grupos y a unos les enseñaban antes de leer un artículo donde decía que los adultos mayores presentan mayor dificultad para recordar lo que leen (o algo así, perdónenme si no es tan específico el caso), y curiosamente a los abuelos que fueron expuestos a este texto antes les fue peor que a quienes no lo leyeron. Este hecho hace que las personas estén más ansiosas y por ende afecte su resultado real.

Si me preguntan después de leer el libro cómo triunfan los niños, mi respuesta es que se deben dar varios factores para esto y aun así algo se podría escapar, algo podría salir mal. Pero creo que, sobre todo, debe haber un sano equilibrio entre todas las cosas.

Unos padres que participen en las actividades y en las necesidades de los niños desde pequeños. Tomando en cuenta sus emociones, guiándolos, enseñándoles que está bien equivocarse, enseñarles el valor del autocontrol, la perseverancia. Tratar de mantener un lenguaje optimista. Amor, cariño. Al menos esto debería ser primordial durante la primera infancia. Y luego, en la adolescencia, donde buscan la aprobación, generar estos puntos de inflexión, motivar, mostrando que pueden lograr metas significativas, como por ejemplo, la chica de 17 años,Keitha Jones, que creció en un ambiente hostil y luego conoce a una maestra que le muestra otra vida, reconfigurando su personalidad , y es capaz de darse cuenta que existe otro mundo más allá de la realidad penosa y angustiante que vive, eso le da esperanzas, le da razón a su esfuerzo para seguir. Utilizando para esto lo que David Levin llamaría fortaleza del carácter o James Heckman denominaría habilidades no cognitivas.

Por segunda vez aparece el ajedrez como estudio importante en un libro que leo. Acá lo mencionan para indicar lo disciplinados que son los ajedrecistas. Hay una parte donde dice que uno puede ser experto en algo si le dedica 10.000 horas, de lo que sea. Yo no sé si eso será tan así, vamos a ver.

Mi papá siempre insistía en que jugáramos ajedrez y aunque de niña aprendí el nombre de las piezas y cómo se movían, jamás logré ganarle una sola partida. Pero ahora creo que podría ganarle si me esmero.

Por otro lado Jeff Nelson  habla sobre 5 principios del liderazgo que permite ayudar a los alumnos a mejorar sus calificaciones significativamente y minimizar las desventajas que ellos puedan tener , estas son : el ingenio, la resiliencia, la ambición, la profesionalidad y la integridad.

Me gustaría quedarme con uno de los mensajes finales : el pasado desafortunado  no condiciona tus resultados futuros.  Puedes mejorar y crecer hasta alcanzar un nivel muy alto.  Esto se consigue trabajando muy duro, requiere mucha perseverancia y bastante personalidad.

Como madre son muchas las lecciones que me llevo de este libro. La importancia de darle mi apoyo y contención a Martina en momentos de angustia y estrés. Sé que es complicado y que no todo es solo amor y contención, también se necesita disciplina , normas y límites , ser capaces como padres de decirle que no en algunas circunstancias y hacerlo acorde a la edad que tiene. 

La parte más difícil creo será preparar a mi hija, darle oportunidad para el fallo , caer y lograr que se levante sola. Se que todo es parte de un equilibrio y quiero hacer las cosas bien. Será un largo camino , una Lucha que espero alcance para que mi hija alcance la felicidad.

Este libro ofrece pistas de cómo hacerlo. Al igual que Spiegel, profesora de ajedrez cuyo trabajo no era evitar el fracaso de sus alumnos sino que enseñarles a aprender de cada uno de ellos, mostrándoles las causas y luego cómo mejorar.